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Durante el año 2023, las alertas alimentarias experimentaron una disminución de aproximadamente un 8% en España. Se registraron poco más de 180 notificaciones significativas, de las cuales la mayoría (el 8%) resultó en acciones importantes como destrucción, prohibición de comercio y retirada del producto del consumo.
 
Estos datos, extraídos del Sistema Europeo de Alerta Rápida sobre Alimentos y Piensos (Rasff), señalan que las principales causas de las alertas están vinculadas a la detección de microorganismos patógenos (especialmente salmonela y listeria), presencia de residuos de plaguicidas y hallazgo de sustancias no declaradas o cuerpos extraños.
 
En el caso de la salmonela, se registraron una docena de alertas en 2023 en España. Destaca una notificación a finales de junio que involucra queso elaborado con leche pasteurizada de vaca y cabra distribuido en España y Portugal. La alerta llevó a la retirada del producto del mercado, aunque no se reportaron personas afectadas.
 
Durante el año 2023 se emitieron alrededor de diez notificaciones serias respecto a la listeria monocytogenes. Destaca la alerta lanzada a mediados de octubre por la Junta de Andalucía debido a la detección de la bacteria en varios productos cárnicos comercializados. Aunque en esta ocasión no se informó de casos de infección humana, es importante recordar que esta bacteria causó cuatro fallecimientos en 2019 en España.
 

Pesticidas o cuerpos extraños

 
Otras alertas relevantes incluyen la presencia de insecticida clorpirifos (en nueve ocasiones), especialmente en maíz para palomitas distribuido en España, Andorra y Portugal. También se activaron ocho alertas por la presencia de componentes no declarados, incluyendo alérgenos, como la alerta de octubre sobre la presencia de apio en tarritos de verduras de la huerta con pollo y arroz procedentes de España.
 
Asimismo, el listado de agentes contaminantes de alimentos es amplio y figuran entre los principales los metales pesados, especialmente mercurio, micotoxinas como aflatoxinas y ocratoxinas; o de biocontaminantes como los alcaloides de la pirrolizidina, atropina y escopolamina.
 

Niveles de seguridad

 
Es fundamental seguir abordando los desafíos en seguridad alimentaria, tomando medidas proactivas y mejorando los controles y prácticas en la cadena alimentaria. La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) y consultoras alimentarias como Elkolab, juega un papel esencial en evaluar y garantizar el nivel de seguridad alimentaria.
 
El servicio de consultoría de Elkolab asesora y acompaña a la industria en el desarrollo e implementación de sistemas de calidad y de seguridad alimentaria. Además, ofrece formación en seguridad alimentaria con variedad de cursos; y un servicio de laboratorio a empresas para verificar que los controles de seguridad alimentaria implantados son eficaces.

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